Muchos países han visto un aumento en la obesidad y los trastornos relacionados con el peso en los últimos años. Los desafíos para los obesos y los que cuidan de ellos incluyen problemas de movilidad, tanto dentro como fuera de los centros de salud.
Las sillas de ruedas estándar y otros muebles y equipos médicos no suelen estar diseñados para mantener a una persona con obesidad severa. Como resultado, una persona obesa que se somete a procedimientos médicos o que no es capaz de caminar por sí misma puede necesitar una silla de ruedas bariátrica.
Las sillas de ruedas bariátricas son más grandes que las sillas de ruedas tradicionales y tienen una capacidad de peso superior a fin de que los individuos puedan ser transportados con comodidad y seguridad.
Además de la necesidad de una silla de ruedas bariátrica, muchas personas y centros médicos necesitan equipos adicionales, tales como eslingas de alta resistencia para la transferencia de pacientes inmóviles de la cama a la silla. Todos estos equipamientos son considerados como de ortopedia, los cuales ayudan siempre a personas con cualquier tipo de dificultad de movilidad.
Al elegir una silla de ruedas bariátrica, es importante poder asegurar un ajuste apropiado. La distribución del peso entre las personas obesas puede variar mucho. Como tal, la capacidad de peso de las sillas de ruedas es sólo una consideración en la elección de una silla de movilidad.
Si una silla de ruedas es demasiado pequeña para el paciente, dicha persona puede experimentar un malestar significativo y tal vez incluso sufrir de úlceras por presión, una enfermedad que no sólo es dolorosa, sino potencialmente peligrosa.
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