El trasplante de pelo implica la extirpación quirúrgica de una parte del cuero cabelludo y su implantación en otra área. Para realizar los trasplantes de pelo, el cabello del donante se toma de los lados o la parte posterior de la cabeza, donde el crecimiento es generalmente más grueso y las cicatrices pueden ocultarse fácilmente.
En la actualidad se ha aumentado el interés en la cirugía de injertos de pelo, y esto ha sido motivado por la constante innovación en este campo. Algunas técnicas más nuevas para realizar el injerto de pelo han evolucionado especialmente en los últimos 10 años. Una de ellas es el microinjerto de pelo, el cual permite un procedimiento menos doloroso y mucho más exitoso.
Unidad de extracción folicular: la extracción de unidades foliculares es un procedimiento de restauración del pelo realizado por un cirujano. Los folículos pilosos se cosechan un folículo mediante el uso de un punzón que deja sólo una pequeña marca. La ventaja de este método es que los folículos se cosechan directamente desde el área donante, sin la necesidad de una incisión lineal. El doctor perfora una incisión circular en la piel cerca de la parte superior de su folículo, el cual se extrae después del injerto de cabello.
Unidad de trasplante folicular: con el trasplante de unidades foliculares se mueve el pelo de una zona permanente a las zonas calvas o calvas en el cuero cabelludo. La técnica consiste en anestesiar a su cuero cabelludo y luego sacar una tira disecada de la zona donante. Con la ayuda de técnicas de disección microscópica, la tira de tejido se divide en unidades foliculares individuales. Pequeños agujeros se realizan en el cuero cabelludo donde las unidades foliculares o injertos son implantados. La experiencia del cirujano juega un papel importante en la determinación de las cualidades estéticas de estos microinjertos de pelo.
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